Preguntas al fin resueltas

Y mi deseo de llegar lejos sigue creciendo, pero mis duda y miedos también...
A veces tengo más miedo de decepcionar a las personas que me importan, que de no hacer lo que realmente deseo. ¿Yeso no es bueno, verdad...? No, no es nada bueno, porque si vivo con el peso, sí, con el peso, porque en el fondo es un peso de no haber hecho lo que realmente me hacía feliz solo por el hecho de contentar a las personas que me importan cuando se supone que mi felicidad tendría que ser la suya? Por supuesto yo no digo que no emita opiniones y puntos de vista, pero no se supone que en mi vida y futuro la opinión que más tendría que importar es la mía? Y, si le doy más peso a lo que digan ellos que a lo que pienso yo, eso sería estar traicionándome a mi misma? Y si el miedo de decir lo que realmente quiero para mi vida a las personas que más contentas tendrían que estar por haber encontrado mi vocación y camino, me impide hacer eso que realmente me hace feliz?
Mientras plasmaba estas preguntas en el blog, me las he ido contestando todas a mi misma, curioso, llevo mucho tiempo buscando respuesta a estas preguntas, y justo cuando no las busco aparecen...
Como decía, me las he respondido a mi misma, y, he llegado a una conclusión, que eso no quiere decir que sea la real ni mucho menos, ya que puede haber muchos puntos de vista diferentes, pero, mi conclusión, es que, debemos aceptar los puntos de vista de las personas que nos importan, y si nos parece mejor, cambiarlo, pero nunca debemos perder de vista lo que realmente queremos hacer y/o llegar a ser, por muchas dificultades que nos aparezcan, y, por muy turbio que se vea el camino. Cuando de verdad deseamos algo, por muchas dificultades, y obstáculos que aparezcan siempre lo conseguimos, por que es lo que de verdad deseamos y queremos.
No hay nada que tenga más fuerza que el deseo, la voluntad y sobretodo y lo más importante el CORAZÓN. Porque a veces, os deseo que nos parecen locuras para la razón, y la experiencia, al corazón le parecen posibles, nunca debemos dejar de hacer esas cosas que gracias a la locura del corazón, nos hacen descubrir que esas cosas que parecían locuras en un principio, es lo que realmente nos hace felices. Así que si el corazón te dicta algo, hazlo, quien sabe, quizá es esa pequeña locura que te va a hacer feliz.